Reflexiones atrasadas

19 junio de 2009

Intentando rescatar un mail viejísimo me encontré con un correo que les enviára a mis amigos el 28 de marzo de 2008 luego de haber sufrido en carne propia a los muchachos de la patota oficialista.

La relectura de este y otros correos relacionados me llevó a reflexionar sobre si habíamos aprendido algo desde aquel entonces y si habíamos madurado colectivamente como democracia e individualmente como ciudadanos.

Entiendo que una respuesta más acabada a estos interrogantes podré formarme en los días posteriores a las elecciones del 28 del corriente.

A continuación copio aquel correo.

Saludos.

Contrapedal

"Buenos Aires 28 de marzo de 2008

Muchachos,

Muchas gracias por sus comentarios, me hicieron emocionar; pero ojo, yo no hice nada extraordinario. Simplemente estaba en ese lugar y los medios lo recogieron, nada más.

Gracias por preocuparse. Estoy perfecto salvo algunos moretones.

Lo que no me gustó de los medios, fue qué no se nota bien claro como fueron ellos los q pegaron y nosotros los q simplemente nos defendimos (sin ni siquiera devolver un golpe). No se si me explico, no es una cuestión de huevos o de quién es más guapo. Nosotros vamos con hermanas, madres y abuelas y ellos son un ejercito perfectamente organizado con caciques que los manejan, palos y fierros.

Canal 26 dijo: “Grupos antagónicos se enfrentaron a golpes de puño y patadas en Avenida de Mayo y Bolívar” MENTIRA NO SE ENFRENTARON GRUPOS DE NADA, Simplemente unos pegaron y otros corrieron.

La policía? Bien gracias, los dejaron q se aburran de fajarnos.

Hasta acá la parte “de color” y los eximo de antemano de leer lo que sigue.

Ahora bien: con todo el revuelo que se armó y aprovechando mi momento de popularidad, no me voy a privar de compartir con Uds., en un tono un poco más formal, algunas reflexiones que me dejó esta situación aún a riesgo de que fragmentos de las mismas puedan resultarles antipáticos:

1.- Celebro el tono más conciliador del discurso de anoche de CFK. Que a diferencia del anterior fue mucho más técnico que ideológico y sanguíneo, en definitiva más propio de un dirigente político serio. El conflicto hace tiempo que había trascendido el tema puntual de política económica, por ende discutible, de las retenciones a la soja para transformarse en una cuestión “racista” o “clasista”, por ende NO discutible, de ricos contra pobres / negros contra blancos que ellos mismos (el oficialismo) se ocuparon de fogonear y que muchos creíamos superada. Esto es preocupante y todos deberíamos abogar por la reconciliación, la inclusión justa y un país para todos dicho esto enserio, en el sentido amplio de su significado, sin eufemismos propios de campaña electoral. Basta de rencores anacrónicos y que le quede bien claro a la opinión pública que más allá de algún idiota inimputable y aislado el campo no apoya a la dictadura ¿Qué tiene que ver una cosa con la otra?

2.- Estamos todos de acuerdo que “no se puede negociar con una pistola en la cabeza” (sic CFK), ahora bien ¿Qué pasa con las que están sobre la mesa de diálogo? Preguntarle a Guillermo Moreno. Basta de hipocresía.

Un grupo de piqueteros que frente a los ojos de la policía inerte y mediante palos y trompadas no dejan entrar a la plaza de Mayo, que es de todo el pueblo argentino, a pacíficos manifestantes que aplauden y golpean cacerolas al grito de Argentina, Argentina. ¿No es represión? Basta de hipocresía.

Yo a diferencia de El, no quiero matar a D´elía simplemente pretendo que la justicia actúe en referencia a los delitos que está probado que cometió y sobretodo le pido al Gobierno que no se burle de mí, a través de declaraciones que minimizan lo que pasó y premiándolo con cargos y lugares en palcos. A falta de fotos y videos que lo comprueban, los moretones en mis brazos y espalda son más que elocuentes. Yo estuve ahí. No me lo contaron.´

3.- Podría seguir aburriéndolos con comentarios sobre otras actitudes o partes del discurso que me gustaron y que no me gustaron, con comentarios respecto a algunas de sus afirmaciones de dudoso rigor técnico en materia de política agropecuaria y económica, con algún humildisimo análisis jurídico respecto a la constitucionalidad de impedir el tránsito por las rutas, del derecho a huelga o de aumentar arbitrariamente y sin aval del Congreso un tributo, pero nada más alejado del objeto del presente.

Está abierta la puerta al diálogo racional y no debemos desaprovechar la oportunidad ni los unos ni los otros de rescatar lo positivo de este “ejercicio de democracia” que esta coyuntura nos obligó a llevar a cabo.

Este diálogo ahora si, es responsabilidad de los dirigentes de ambos sectores. Por último, me permito agregar a los atributos del buen político según el discurso de nuestra Señora Presidenta; Moderación y Prudencia.

Perdón por atosigarlos con esta perorata, pero me sentí compelido a dejar por escrito lo que me está pasando por la cabeza estos días.

Abrazo."